Phi Phi, EFE - El lugar, antaño remoto y cuya presencia era casi un secreto local, recibe ahora cada día a cientos de turistas atraídos por la arena blanca y aguas cristalinas de la cala en la que se bañaba un joven y bronceado Leonardo DiCaprio.
Maya Beach, el nombre oficial de "La Playa", cuenta ya con espacios reservados para camping, baños públicos, un camino señalizado, rutas de evacuación en caso de tsunami, cubos de plástico para tirar basura e incluso un bar que sirve a los turistas cerveza fresca para contemplar el atardecer.
"Antes de 'The Beach' ('La Playa'), la gente venía a Phi Phi por su belleza, ahora todos nos visitan por la película", explica Aegatat Naweewong, guía de la agencia de viajes local Sunset Trip, que ofrece salidas de medio día con actividades de canoa y snorkel por 450 bat (unos 14 dólares)
No hay comentarios:
Publicar un comentario