Juan Esteban Aristizábal Vásquez tiene, en 2012, el mismo carisma y la misma sencillez con que, en 1999, llegó a una pequeña sala de su disquera, entonces ubicada en La Castellana, y que con su guitarra en mano cantó algo para los pocos periodistas que fueron a conocer al invitado de ese año del Festival Nuevas Bandas.
Trece años después, sentado en una cómoda butaca de un hotel cinco estrellas caraqueño, curiosamente cerca de donde quedaba la compañía que hoy ya no funciona en el país, rememoró el momento y, sin ponerse mucho a sacar cuentas, aseguró que ve todo lo que le pasó desde ese día hasta ahora “como un torbellino.
Todo sucedió mucho y muy rápido. Hubo un momento en el que me sentí abrumado y que giraba sobre lo mismo. Por eso decidí darme una pausa y no un retiro, como se dijo equivocadamente”.
¿Sus últimas canciones sonaban repetitivas por eso mismo?
Te refieres a P.a.r.c.e, mi anterior producción que fue el detonante para que tomara una decisión. Fue mi purgante, porque se convirtió en el reflejo del cansancio creativo que viví. El stop fue para que eso no continuara sucediendo.
En una entrevista reciente dijo que su nuevo trabajo, “Tr3s presents Juanes MTV unplugged”, nació de la libertad. ¿De qué se sentía preso?
Quise romper las cadenas, cerrar ciclos y tomar riesgos. Ahora quiero ser más arriesgado con mi música.
¿En qué sentido? No me diga que va a cantar reguetón.
(Risas) No. Respeto todos los géneros de música, pero me refiero a volver más hacia el rock, como aquella primera vez que vine a Venezuela.
¿Qué significó trabajar con Juan Luis Guerra como productor de su nuevo CD?
Fue una experiencia grandiosa.
Él se encargó de los arreglos y juntos seleccionamos el repertorio e invitamos a cantar a Joaquín Sabina y a la brasileña Paula Fernandes. Trabajar con el maestro Guerra fue un sueño.
¿En esos riesgos que quiere tomar ahora se encuentran actividades como los conciertos por la paz?
Por supuesto. Lo que pasa es que esas actividades desgastan mucho. Energéticamente uno queda absorbido, pero son muy gratificantes. Por los momentos, no tengo planificado ni pensado otro.
En realidad, no hay que pensarlos mucho cuando las circunstancias se presentan.
¿Cómo hace para tratar de mantener el equilibrio con todo lo que implica el mundo artístico y más ahora que volvió a encabezar las listas de popularidad con sus temas?
Hago esto porque amo estar en un escenario. El amor por la música es lo que me mueve a ser como soy.
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