Tras una larga espera y un intro igual de distendido, en el que una narradora de noticias daba la bienvenida al Metamorfosis Tour, se inició la primera de las tres funciones que Ricardo Arjona brindará en Caracas, en el Ccct.
Vida fue uno de los temas que sonó en el mix inicial, antes de que apareciera el cantautor en el segundo piso de un escenario que, con intención o sin ella, evocaba los que trajo en años anteriores al país. Obviamente, éste lucía con elementos distintos y decorados giratorios, en los que podía ser desde una biblioteca hasta un circo, pasando por el tradicional bar, que siempre acostumbra, o por el “filo” de las escenografías para cantar.
Lo cierto fue que, en escena, se vio a un Arjona reloaded -recargado-, quien adaptado a lo multimedia echó mano de dos pantallas en su gran tarima para darle la sorpresa a las decenas de fans que desde temprano en la mañana hicieron la cola para verlo.
Acompañame a estar solo, El amor, Mi novia (en la que tocó el organillo, “un instrumento que me dijeron que ustedes no conocen aquí”) continuaron en el repertorio. Para Historia de Taxi lo acompañaron sus coristas. Una, cantando y la otra tocando el violín, luego de que desde una de las pantallas centrales pidiera hacerlo “porque no puede ser que los hombres siempre se queden con los mejores solos”. Bajó y tuvo una suerte de contrapunteo con el violinista de la banda.
El problema fue el primer falso final. Tras unos segundos reapareció con un gorro negro para el segundo final de mentira con Minutos. Volvió el video del inicio del tour Metamorfosis anunciándolo sólo si la gente lo pedía con euforia. La respuesta no se hizo esperar y Arjona salió con una franela blanca para cantar Mujeres.
UN
No hay comentarios:
Publicar un comentario