Uno de los mejores laterales izquierdo de la historia, el brasileño Roberto Carlos, está terminando su carrera en el fútbol ruso a sus 38 años. Sin embargo, no lo ha pasado bien en el Anzhi Majachkalá, escuadra que marcha en la quinta posición en la Liga Premier.
El miércoles pasado, el lateral brasileño sufrió por segunda vez un acto racista. Un plátano lanzado por un hincha en el duelo que su equipo le ganaba por 3-0 al Krylia Sovietov, cayó justo donde se encontraba ubicado, provocando que se retirara del partido. La leyenda brasileña, se sentó en el banco de suplentes, rompió en lágrimas y sus compañeros afirmaron que no pudo contener el llanto hasta abandonar el camarín.
Es por eso que el capitán del FC Anzhi quiere dejar el fútbol, decepcionado por la discriminación sufrida en las canchas rusas. La vez anterior, camino a los vestuarios, un hincha le mostró en su cara un plátano abierto.
"Se me pasó por la cabeza dejar el fútbol. Pero he tomado la decisión de seguir por ahora. Si sucede algo así de nuevo me retiro", relató Roberto Carlos tras el suceso. Además, añadió que "me sentí demasiado triste. ¿Saben lo que es sentir impotencia? Así me sentí. Me fui triste, herido. Habían muchos niños ahí. Esto tiene que ser castigado".
Para rematar, el ex lateral del Real Madrid relató por qué decidió seguir, al menos, por un tiempo más en el fútbol. "Cuando llegué a los vestuarios mis compañeros me abrazaron y cantaron para mí. Fue una cosa impresionante".
La Tercera
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