Un centenar de tatuadores y “pirceadores” de Latinoamérica y del mundo protagonizan Expo Tattoo, una gran exhibición sobre el tatuaje y sus derivados que convierte a Caracas durante tres días en la capital latinoamericana de la modificación corporal.
La oferta de tatuajes es inmensa y cada expositor tiene un estilo y formas particulares, pues mientras unos proponen una estética “satánica” con calaveras o payasos asesinos, otros prefieren estampar figuras espirituales o de fantasía como vírgenes o hadas.
“Este es mi cuarto tatuaje”, dijo a Efe Ninfa Camacho mientras el “body art” (tatuador) Jack Estrada, del occidental estado venezolano de Yaracuy, le imprimía una hermosa chica de cabellos plateados de unos 30 centímetros. “Este tipo de tatuaje cuesta entre 2.500 y 2.800 bolívares (580 dólares ó 425 euros)”, comentó a Efe Estrada, alias Pantera.
Del estado de Mérida llegaron a demostrar sus habilidades José Manuel, como 'pirceador' y José Augusto, como tatuador, ambos sensibilizados con la cultura hindú y que aseguran que por ello han bautizado su tienda como Siddartha Tatoo. “Estas son las imágenes que me gusta tatuar”, dice José Augusto mientras muestra un catálogo de dibujos en los que predominan la imagen de Buda y otras figuras hindúes.
El puesto de los merideños también ofrece tabaco y cigarros, “porque todo esto forma parte de una cultura de adicción, los fumadores son adictos y los que se hacen tatuajes también”, dice José Manuel. Según el famoso tatuador venezolano Emilio González, organizador del evento, los especialistas en el arte de modificar el cuerpo que participarán en el evento “son los mejores de América Latina y del mundo”.
González alcanzó la fama en la región tras aparecer en un popular programa de televisión por cable transmitido en la región junto a otros modificadores corporales como Caín Tubal, de Colombia, y Víctor Peralta, de Argentina, quienes también estarán en Expo Tatoo. En uno de los principales puestos expositores de la exhibición está ubicado Víctor Peralta, uruguayo radicado en Argentina quien llegó para modificar pieles y para mostrar su cuerpo, tatuado “en un 80 por ciento”.
“Todavía me queda 20 por ciento de piel y ahí ya veré qué me hago”, dijo a Efe Peralta, quien además tatuajes tiene unos 15 piercing repartidos entre la cara y los genitales, y dos estrellas que están debajo de la piel de su frente que lo convierten en “el único estrellado”.
“Lo más novedoso que estoy haciendo, y que me he hecho, es la escarificación, una técnica que consiste en quitar piel con un bisturí para lograr formas en relieve”, comentó el artista argentino mientras invitaba a palpar la gran flecha que se “abrió” en el cráneo.
Peralta dijo haber decidido poner el límite de 15 años a los chicos que quieren hacerse tatuajes. “A mi tienda han llegado niños de 12 años y me parece que a esa edad no saben lo que quieren”, dijo, y agregó que también ha tenido clientes de 80 años.
Cain Tubal, el colombiano que ha modificado su cuerpo para parecerse a la imagen que cree debe tener el diablo, es una de las figuras más esperadas en la convención, sin embargo, y aunque está confirmada su presencia, no es seguro que pueda llegar a la Expo Tattoo 2011 de Caracas, abierta del 28 al 30 de enero.
“Caín, el Diablo de Bogotá, iba a llegar hoy, pero ha tenido problemas en el aeropuerto, ojalá pueda llegar el domingo”, comentó a Efe Emilio González, quien lo espera para compartir el escenario de las “suspensión”.
A final de la tarde de cada día de exhibición se mostrará al público un espectáculo de “suspensiones”, que consiste en que los participantes atraviesan la piel de sus espaldas con unos garfios que posteriormente son elevados lo más alto posible y, bajo esas condiciones, realizan piruetas.
Cada día de exhibición contará con competencias entre tatuadores, conciertos de rock y muestras de actividades relacionadas con la cultura urbana, como el “skateboard” o patinaje en rampas.
El Espectador.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario