Agobiada por las culpas , se suicidó la madre de Isabelle Caro, la modelo francesa que murió por anorexia. Sucedió el 4 de enero, pero la noticia recién trascendió esta semana, a través de una entrevista a Christian Caro, padre de la joven, difundida por el portal suizo 20 Minutes .
Si bien Isabelle Caro murió el 17 de noviembre pasado, la familia guardó reserva hasta fines de diciembre. La joven de 28 años había sido internada el día anterior en el Hospital Bichat de París, por “un dolor de vientre”, según su padre.
Medía 1,64 y pesaba 31 kilos.
Christian Caro afirmó que el trastorno de su hija se desató en 2002, pero ella misma lo situó a sus 12 años, en su libro autobiográfico La chiquilla que no quería engordar . Allí narró su infancia desdichada , con un padre ausente y una madre depresiva a quien sólo le gustaban las personas flacas.
Isabelle fue volcándose hacia el teatro, con el sueño de ser comediante. En 2007, el célebre fotógrafo italiano Oliviero Toscani la convocó para una campaña contra la anorexia costeada por la fábrica italiana de ropa Flash & Partners, para su marca No-l-ita, de ropa para adolescentes.
Esos desnudos esqueléticos y angulosos tuvieron un inmenso impacto en todo el mundo y, aún cuando en muchas personas generaron la repulsión que Isabelle había previsto, cumplieron el objetivo que ella se había trazado, de crear conciencia sobre la anorexia.
Ya un año antes, la Pasarela Cibeles, en Madrid, había rechazado a un 30% de las modelos que habían desfilado en la edición anterior, por tener el índice de masa corporal por debajo de 18, incluso más bajo que el mínimo establecido por la OMS como saludable, que es 18,5. Sólo Milán –otro de los grandes centros de la moda– tomó una decisión similar, acorde con la directiva de la OMS.
En los últimos años y en medio de sus propios altibajos, Isabelle inició una lucha pública contra la anorexia, a través de charlas y presentaciones. De regreso de Tokio debió ser internada. Su padre inició una demanda por mala praxis contra el Hospital Bichot, porque –dijo– la anestesiaron para hacerle estudios. Según el hombre, su esposa, Marie, no soportó la culpa , porque la joven no quería ir a ese hospital. Agregó que también la afectaron palabras poco elogiosas de Toscani. “Eramos una familia muy unida”, dijo el padre.
Clarín.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario