"Me pasa algo raro: cuando me acuesto con alguien, creo que me van a quitar la creatividad a través de la vagina", disparó, polémica como siempre. Increíble pero real, eso es lo que siente Lady Gaga. Y se lo confesó a la revista Vanity Fair que, en su versión inglesa, le dedicó la tapa.
Como una Lady Godiva del siglo XXI, la intérprete de Just Dance se expuso frente a la cámara de Nick Knight desnuda, cubriendo sus pechos con su larga cabellera rubia, haciendo gala de sus tatuajes y luciendo sólo una gargantilla de diamantes.
Pero detrás de tanta sensualidad, se esconde una persona solitaria y vulnerable. “Siempre estoy sola, incluso cuando estoy en una relación”, contó. Redoblando la apuesta, admitió que siempre se sintió atraída por romances perjudiciales que fueron los que la inspiraron en la creación de su último hit, Bad Romance. Y, como si no fuera suficiente, expuso abiertamente que “ahora soy bastante célibe. Realmente no tengo tiempo de conocer a nadie”. Algo difícil de creer, ¿no?
A los 24 años, la nueva Reina del Pop -que el mes pasado superó la popularidad de Barack Obama en Facebook-, no se calló nada y habló sobre su relación con las drogas. Admitió, sin problemas, que la adicción la llevó a un punto muy bajo en su vida y que la arrastró casi al desastre. Por eso, “espera que sus fans no la imiten en ese aspecto”. Contó, también, cómo su familia –y especialmente su madre y su abuela- la ayudaron a superar el problema.
Fuente: www.entremujeres.com
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